A pesar del suelo de madera pintado en berenjena oscuro y de que algunas de las paredes están pintadas en negro, este piso situado en Berlin no es oscuro para nada ya que esta lleno de notas de color que restan dramatismo a los colores oscuros.
Buen ejemplo es la cocina lacada en color rosa, aunque también llaman de este piso la atención el sillón vintage de Hans J. Wegner, el trío de lámparas de Tom Dixon sobre la mesa de comedor Pirkka, la alfombra de origen bereber comprada en París o el cuadro de Rubén Toledo amigo del propietario de esta magnifica casa.
Imágenes: Dwell
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